Ventajas del inflado con nitrógeno para llantas
Unas llantas con la presión adecuada garantizan la estabilidad del vehículo, un mejor manejo y una mayor vida útil. Normalmente se inflan con aire, pero en la actualidad, el inflado de nitrógeno se está convirtiendo en una tendencia entre los conductores.
A continuación, detalles de este procedimiento:
De los neumáticos de avión a las llantas de vehículos
Es conocido el uso de un porcentaje mayor de nitrógeno en las llantas utilizadas en las carreras de Fórmula 1 y los aviones comerciales. Al ser un gas inerte y estable, es decir, tiene una poca o nula reacción a la temperatura ambiente, es el ideal para este tipo de neumáticos que funcionan en condiciones extremas de temperatura y velocidad.
Beneficios del nitrógeno para llantas
Ahora, este método ha sido adoptado para las llantas de los vehículos convencionales. Pero ¿realmente puedes utilizar el inflado con nitrógeno en tus neumáticos o solo es beneficioso para aquellos que les gusta correr?
Provoca un menor desgaste en las llantas
Este gas es compatible con cualquier modelo, tamaño y tipo de neumático. Entre sus beneficios destaca que, a diferencia del aire, que tiene mucha humedad, el nitrógeno es seco, ocasionando menor oxidación y deterioro de las llantas. Por otro lado, las hace más resistentes ante los agentes que causan la corrosión y deformación de las bandas de rodamiento.
Presión más estable y mayor adherencia
El nitrógeno favorece la vida útil de tus llantas entre un 25 y 30%, según estudios especializados. Mantiene mejor la presión, ya que su densidad es más estable ante los cambios de temperatura. Esto disminuye las filtraciones que causan el desinflado del neumático y lo mantienen más tiempo con la presión adecuada.
Además, su estabilidad mantiene la adherencia ideal de las ruedas sobre la calzada, mejorando el frenado sobre el asfalto. Esto garantiza que al manejar el vehículo sientas mayor seguridad y agarre.
Al mismo tiempo, la gran tolerancia del nitrógeno a temperaturas altas también reduce las posibilidades de explosión de tus neumáticos.
Más ecológico que el aire convencional
Debido a que un neumático bien inflado puede representar hasta un 10% de menor gasto de gasolina, se concluye que el nitrógeno para llantas contribuye con el ahorro combustible, lo que, indirectamente, logra que tu vehículo emita menos concentración de C02, por lo que estarás siendo respetuoso con el medio ambiente.
Para cambiar de aire a nitrógeno por primera vez se deben desmontar los neumáticos y desinflarlos por completo. Lo ideal es buscar un lugar que brinde este servicio de forma especializada. En ese sentido, y pensando en brindar la mejor prestación a sus clientes, en Portillo el inflado con nitrógeno está disponible como parte del servicio postventa.